Para ello voy a contaros una noticia que en realidad sucedió hace unos días, pero me hizo reflexionar.
Esta noticia toma como título "China sueña con Singapur", y trata sobre la muerte del primer ministro singapuriense Lee Kuan Yew. El enlace está al final de la entrada por si queréis saber más sobre ello.
Yo sólo voy a centrarme en una parte de ella.No os asustéis, no os voy a hablar de política.
Y es que hay algo que me llamó más la atención en la noticia que la noticia en sí. Como bien ya adelanta el título, China es un país que sueña con adaptar el plan político que tanto ha funcionado en Singapur gracias al reciente fallecido, entre otros.
De entre todos los datos que la noticia aporta, este es uno de los que más me sorprende:
"Fiel a esa máxima, el Gobierno chino ha enviado a muchas de sus jóvenes promesas a formarse en los cursos de la Universidad Nacional de Singapur y la Universidad Tecnológica Nanyang para aprender cómo conjugar el desarrollo económico y la buena gestión con un código moral confuciano, sin caer en veleidades multipartidistas."
Es muy poco lo que sé sobre China y quiero tomarme este blog como una manera de aprender sobre este país.
Un país que consideraba una potencia mundial y que, desde que comencé los estudios universitarios, tengo en mente como lugar en el que llevar a cabo una parte de mis estudios.
Sin embargo, esto hace que me lo piense dos veces. ¿Debo ir a estudiar a un país donde mandan a sus estudiantes a universidades extranjeras? Creo que se trata de una visión negativa hacia el país, que se suma a otras mencionadas en el artículo, como son la libertad de prensa, entre otras.
El plan político adaptado en Singapur se basa en las ideas de un solo hombre y veo imposible que algo así suceda en un país como China, que supera con creces los habitantes de Singapur.
Sin embargo, aunque el sueño sea imposible, la idea me aterroriza. Como bien cierra la noticia:
“las políticas clave se tienen que basar más en un consenso nacional y menos en la opinión de un genio”.
Lidia Álvarez